La notarización implica la participación de un notario público en la preparación de un documento, confirmando su autenticidad. Las traducciones notariadas de registros importantes en idiomas extranjeros, como transcripciones educativas y diplomas, cumplen con los requisitos de certificación. No todas las traducciones certificadas requieren notarización, pero es crucial trabajar con una agencia de traducción acreditada reconocida en la jurisdicción específica, como Cervantes Legal Translation.
